Museo de Bellas Artes

Está ubicado en el ex Convento de los Carmelitas Descalzos, cuya construcción data de 1697. Se trata de uno de los más importantes ejemplos del patrimonio arquitectónico e histórico del pueblo mexiquense. Al paso de los años funcionó como asilo, hospicio, hospital y sede del Instituto Científico y Literario, hasta que el 7 de septiembre de 1945 fue inaugurado como museo. Después de un largo periodo de restauración, fue re-inaugurado el 17 de octubre de 2002. Su objetivo es preservar y difundir el arte sacro y el arte aplicado de los siglos XVI al XIX. 


Entre las obras de arte que resguarda, destacan objetos dedicados al Divino Rostro, representaciones de santos y santas, un Cristo de marfil de la Nao de China y la réplica de la pila bautismal que se encuentra en Zinacantepec. Su guión museo-gráfico ofrece un panorama del ambiente religioso carmelita del siglo XVIII. Organiza exposiciones temporales y talleres artísticos.