Cambridge. Mark Zuckerberg regresó a Harvard por primera vez, disfrutando de una cálida bienvenida en la universidad donde creó Facebook y donde se embarcó en un ascenso meteórico documentado.
Estaba claro que Zuckerberg ya no era aquel que dejó la emblemática institución de la Ivy League, a pesar de seguir vistiendo el clásico uniforme del campus: camiseta, vaqueros y tenis.
La recepción de estrella del rock de Zuckerberg supuso un cambio colosal con respecto a cuando el famoso emprendedor pasó por un momento problemático tras crear Facemash, una página web que permitía a los usuarios clasificar a sus compañeras por su atractivo en un incidente que salió inmortalizado en el filme.
Hablando atropelladamente, como es habitual en él, Zuckerberg parecía un poco impulsado por el personaje que Aaron Sorkin imaginó para "The Social Network". Pero su franqueza y su humor en las respuestas terminaron por ganarse a la multitudinaria audiencia.
Más apegado a la codificación que a los clásicos, Zuckerberg reconoció alegremente una carrera académica mediocre.
Al menos un profesor de Harvard, el historiador británico Niall Ferguson, ha advertido a sus estudiantes que suspenderá al alumno que encuentre utilizando Facebook durante sus clases.
En respuesta a una pregunta sobre la política de privacidad de la red social -un tema de constantes críticas para la empresa- Zuckerberg dijo que Facebook era mucho mejor que otros sitios que recogían datos de usuarios confiados para luego utilizarlos como objetivos de publicidad.
"La gente comparte mucha información, pone tantas cosas en Facebook que la forma en cómo se tratan sus datos es muy importante y siempre estamos trabajando en más cosas para hacerlo más transparente", dijo.
Zuckerberg también predijo que la cantidad de contenido que la gente comparte en Facebook se duplicaría anualmente durante los próximos años.